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Qué es la parto natural
El parto natural ha sido recientemente estudiado a partir de los años 50 cuando doctores como el Dr. Fernand Lamaze, Frederick Leboyer, entre otros, desarrollaron métodos alternativos a los partos “artificiales” practicados en los hospitales. La pregunta es porqué los animales pueden parir en forma natural sin la ayuda de anestésicos, medicamentos o cualquier método artificial. Tanto gatos, perros, vacas o cualquier otro mamífero son capaces de parir, en la mayoría de los casos, en forma exitosa y natural sin haber tenido ningún entrenamiento previo. La respuesta es que ellos actúan por instinto. Su instinto les dice lo que deben de hacer en cada etapa del proceso. Esto les evita desgaste y dolores innecesarios. Incluso saben los cuidados que deben dar a sus crías inmediatamente después de nacer.
Por otra parte, los humanos nos hemos alejado de nuestra naturaleza y nuestros instintos se han adormecido. Es por eso que ahora se requiere de un entrenamiento para lograr que la mujer pueda parir en forma natural, con la ayuda de la respiración, de posturas especiales y con el acompañamiento de su pareja.
Así que en resumen, el parto natural busca que la mujer pueda dar a luz con el mínimo de intervenciones médicas como la epidural, la episiotomía, los medicamentos u hormonas; aplicándolos solo cuando sea estrictamente necesario. En realidad, el parto natural no es nada nuevo, es el tipo de parto que se practicaba hasta hace pocos siglos cuando la medicina avanzó y los médicos tomaron el papel, que antaño fuera de las parteras.
No debemos olvidar que antes del avance de la ciencia médica el número de muertes de niños y madres en el momento del nacimiento, era mucho mayor que en la actualidad. Los conocimientos de asepsia, antisepsia, fisiología, así como el desarrollo de antibióticos y medicamentos han ayudado a minimizar los riesgos durante el embarazo y el parto. Concluyendo que lo más sensato será recurrir a lo mejor de ambos mundos: optar por un parto natural, pero sin desestimar el seguimiento y ayuda médica que pueda ser requerida.
Ventajas del parto natural
Una de las mayores diferencias entre un parto natural y uno quirúrgico es la actitud que toma la mujer, y su pareja: En el parto asistido la mujer es sedada y el protagonista el parto es el médico quien decide el momento y la forma de nacimiento. Y no exageramos con esta frase ya que el médico decide retrasar o acelerar el parto mediante hormonas. En la mayoría de los casos, más bien se trata de acelerar el proceso, ya que “time is money”, para lo cual se administra oxitocina que provoca las contracciones del útero. A muchas mujeres les ha parecido que este método ha sido bastante invasivo, agresivo y han quedado con la sensación de que les hubiera gustado haber seguido el proceso con su ritmo natural.
También en cuanto a la forma de nacimiento los médicos deciden, cada vez con mayor frecuencia la cesárea. De esta forma pueden “programar el Parto” adaptándolo a sus horarios y se “ahorran” el tiempo que toma el trabajo de parto, además sus honorarios por realizar la Cesárea suelen ser mayores. Esto explica como es que en algunos hospitales (en distintos países) las Cesáreas pueden llevarse a cabo hasta cerca del 50% de los partos, cuando la Organización Mundial de la salud estima que este procedimiento no debería superar un 15% de los casos.
En resumen, en el parto quirúrgico el Médico es el protagonista, la mujer toma un lugar pasivo y la pareja es prácticamente inexistente, cuando más podrá llegar a ser un espectador del evento. Mientras que en el parto natural la mujer y su pareja se entrenan para ser los protagonistas del parto, tomando un papel activo. El obstetra o la matrona pasan a ser guías y elementos de apoyo. Vemos los principios propuestos por uno de los pioneros del parto natural, el Dr. Lamaze.
Para dudas o comentarios: info.gfulineasolar@gmail.com