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La práctica del baño al natural brinda excelentes beneficios a todo el mundo, y la gestante también se beneficia de esta práctica sin que exista algún impedimento para llevarla a cabo. El baño se toma inmediatamente después de haber practicado la gimnasia, cuando el cuerpo aún conserva el calor del ejercicio. Agua “al natural” significa que no se va a calentar el agua para tomar la ducha, sino simplemente se deja salir de la regadera a la temperatura ambiente, o natural. De esta forma el cuerpo se fortalece y reacciona mejor ante los cambios de temperatura. Se ha demostrado que quienes practican habitualmente el baño de agua al natural gozan de un sistema inmune mucho más activo y con menos frecuencia contraen infecciones de vías respiratorias. La mujer también está fortaleciendo su cuerpo de esta forma.
Un segundo beneficio es el que brinda el agua fría a la piel. La piel es nuestro tercer riñón que todo el tiempo está eliminando las toxinas a través de cada poro mediante el sudor. Sin embargo, el agua caliente entorpece este proceso y las toxinas se quedan en la sangre favoreciendo la propagación de todo tipo de enfermedades. Mientras que el agua fría, al contacto con la piel provoca una vasodilatación que ayuda a salir a todas las toxinas bajo la ducha.
Para mejorar el proceso se aconseja cepillar la piel antes de meterse a la ducha. Se usa un cepillo de cerdas naturales, siguiendo la dirección de los extremos al centro del cuerpo; con ello tonificamos la piel y el sistema cardiovascular.
Enseguida se mete a la ducha. (si es principiante puede meter primero un brazo, o la cabeza, y después ir metiendo todo el cuerpo). El baño es rápido, energético y completo. Tampoco se trata de quedarse media hora porque entonces sí se podrá enfriar demasiado el cuerpo, unos 5 a 7 minutos son suficientes para una ducha y baño con agua al natural.
Para finalizar, nuevamente se puede frotar el cuerpo vigorosamente con una toalla, de esta forma se acaba de tonificar la piel y el sistema cardiovascular. Los pequeños vasos sanguíneos que irrigan la piel se han contraído y relajado durante este proceso, es como una gimnasia para el sistema cardiovascular, que de esta forma se tonifica y mejora su función. La mujer notará que su piel puede soportar mejor el frío, sin enfermarse o sentir molestia, su piel estará mejor irrigada y por lo mismo más bella y saludable.
Para dudas o comentarios: info.gfulineasolar@gmail.com