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Unidad I Lección 5
Como vemos la bioenergética abre todo un abanico de posibilidades para el terapeuta en cuanto a las preguntas y las cuestiones que puede preguntar; por lo cual probablemente el que se inicia en este nuevo nivel se pregunte por dónde comenzar.
Para comenzar puede utilizar el protocolo que ya conoce, ya sea que use los que enseñaba el Dr. Goiz en sus cursos, los que se encuentran en la Guía de biomagnetismo, en alguna otra guía, o alguno que haya ideado por cuenta propia. De esta forma el terapeuta puede hacer un rastreo completo (lo recomendado por el Dr. Goiz) en cada sesión para así abarcar los posibles trastornos causados por virus, bacterias, hongos o parásitos; para continuar con pares disfuncionales, especiales, y psicoemocionales. En cuanto a los reservorios el terapeuta puede testearlos al principio de la sesión y colocar los imanes para así hacer que los patógenos se puedan manifestar unos minutos después en los pares que les corresponden.
Si queremos seguir el método tradicional del Dr. Goiz sería omitir los reservorios e ir directamente a la secuencia que él enseñaba en sus cursos y que los alumnos memorizaron como el Padre nuestro del biomagnetismo, Pineal, hipófisis, ojo, mediastino, etc. etc. Obviamente en cada punto que uno pregunta uno va revisando la respuesta, ya sea con las piernas, los dedos de las manos o el péndulo. Pero, en fin, si lo vamos a hacer de la forma tradicional sería tomando los tobillos del paciente. De esta forma podemos hacer un rastreo completo usando la secuencia de testeo del Dr. Goiz.
Aunque si el terapeuta comenzó en el primer nivel con un protocolo distinto y ese es el que mejor domina, lo más indicado es que tome ese protocolo como plataforma de inicio y ya sobre la marcha lo irá modificando, de ser necesario.
La gran ventaja es que el nivel avanzado nos permite realizar el testeo de otras formas que nos pueden ahorrar tiempo. Por ejemplo, si usamos las listas de la Guía de biomagnetismo nos podemos ir directamente a la lista básica de 173 puntos e ir testeando uno a uno. Con ello podremos testear todos los pares de patógenos y la mayoría de los especiales.
O bien podemos ir de lo general a lo particular. Si usamos por ejemplo la Guía de biomagnetismo podemos preguntar ¿Hay pares de reservorios que deba aplicar en esta sesión? Si obtenemos una respuesta positiva entonces comenzamos a recorrer la lista de reservorios, lo cual también se puede hacer por grupos de pares, por ejemplo ¿Hay algún par entre los números 1 al 9? Si/no ¿Hay algún par entre los números 10 al 19? Si/no y así continuamos con toda la lista. En el grupo donde tengamos una respuesta positiva entonces nos vamos preguntando de uno en uno para encontrar el par que se debe aplicar.
En el caso de otras listas de patógenos, los pares especiales y psicoemocionales podemos preguntar por letras del abecedario, ejemplo:
De esta forma podemos recorrer todos los pares disponibles en la Guía de biomagnetismo.
Y bueno, aún tenemos otro recurso que son las listas por zonas del cuerpo que en la Guía de biomagnetismo se encuentran bajo la pestaña de protocolos. Las cuales se pueden utilizar de forma similar, de lo general a lo particular como ya se explicó. Como vemos, la guía de biomagnetismo cuenta con muchos recursos para el nivel avanzado, para que el terapeuta elija aquel o aquellos que más le acomoden según su gusto y de acuerdo a cada paciente y situación particular.
¿Cómo formular preguntas?
En el nivel avanzado es muy común hacer a un lado las listas y los protocolos y avanzar en forma digamos, independiente. Se da el caso que muchas veces llega una persona con una molestia o un trastorno específico que quiere tratar. A veces incluso acompañado de un diagnóstico médico y estudios de laboratorio. Una forma de abordar la situación es comenzar directamente con el problema que presenta la persona. Por ejemplo, si se trata de una infección en vías urinarias podemos buscar directamente los pares relacionados con ese tipo de infecciones. O si la persona presenta migraña, podemos preguntar sobre los pares relacionados con ese síntoma. Ya después de colocar esos pares específicos entonces ya podremos proceder con un protocolo para hacer un rastreo completo.
En algunos casos la pregunta es tan directa como: ¿debo aplicar el par carina – carina? ¿tiene infección por cándida? o ¿le viene bien el par sien-sien para la migraña?
Pero muchas otras veces las preguntas pueden no hacer ninguna referencia a los pares, por ejemplo ¿Esta infección la ha contraído por contacto sexual? En este caso incluso se le podría indicar (con bastante tacto) el tipo de infección que tiene e incluso preguntarle a la persona el nombre de su pareja sexual, o si ha tenido varias, así la pregunta podría reformularse como ¿Esta bacteria fue contagiada por contacto sexual con (nombre de la pareja)?
La regla para hacer una pregunta es que sea lo más específica posible y que se pueda obtener una respuesta en forma binaria, es decir de “sí” o “no”.
Una pregunta incorrecta sería: ¿qué dosis de tal medicamento debe tomar? Suponiendo que usted pueda prescribir medicamentos alopáticos o que se tratara de un remedio homeopático. De todas formas, la pregunta no está bien formulada porque no se puede responder en la forma de afirmación o negación.
En fin, como ya mencionamos, por este medio se pueden formular infinidad de preguntas sobre diversos aspectos como alimentación, alergias, emociones atrapadas (que veremos en una unidad especial), otras terapias alternativas. Por lo que este medio de diagnóstico se puede aplicar para otras terapias como Flores de Bach, herbolaria, homeopatía, carencias alimentarias, etcétera. El terapeuta de nivel avanzado puede seguir agregando herramientas a su arsenal, conforme se vaya preparando en otras materias que puedan complementar con el biomagnetismo.
Por su parte, la Guía de biomagnetismo contiene artículos y secciones que pueden servir para cuestionar en base a listas específicas sobre temas como intoxicación, alergias, carencias alimentarias, trastornos genéticos. Los temas más importantes los veremos con más detalle en las siguientes unidades de este curso.
Para finalizar recalcar que las preguntas siempre se deben formular con la finalidad de ayudar a la persona. Nunca por simple curiosidad y mucho menos con la finalidad de dañar o tomar alguna ventaja del conocimiento. La ética profesional del terapeuta se impone, siempre teniendo presente la secrecía de los datos y vida del paciente.
Preguntas o comentarios: info.gfu.lineasolar@gmail.com
