Unidad I Lección 1

La bioenergética médica es el nombre que el Dr. Isaac Goiz Durán dio al biomagnetismo cuando se utilizan facultades avanzadas que permiten el diagnóstico y curación trascendiendo las limitaciones físicas. Con esto nos referimos en particular al testeo mediante el esfuerzo mental como lo llamó el Dr. Goiz y a la tele-bioenergética.
El testeo mediante el esfuerzo mental permite realizar algún protocolo de rastreo sin la necesidad de colocar físicamente los imanes en los distintos puntos del cuerpo del paciente. El Dr. Goiz comenzó a practicar este tipo de testeo en el año de 1993, después de haber tratado a miles de pacientes usando el método original.
El tratamiento a distancia o tele-bioenergética, como lo llamó el Dr. Isaac Goiz Durán, permite realizar tratamientos usando lo que podríamos llamar una antena. La antena es una tercera persona, a quien se le colocan los imanes y se le da el tratamiento, pero ella funciona como medio de conexión para que el tratamiento tenga efecto en el paciente (receptor), sin importar el lugar donde este último se encuentre, ni la distancia que haya entre el terapeuta y el paciente.
El testeo bioenergético y la tele-bioenergética llevan al biomagnetismo a un nuevo nivel mucho más avanzado de lo que ya de por sí representa el biomagnetismo básico. Es por eso que podemos afirmar que ambos sistemas representan toda una revolución en los tratamientos alternativos, y seguramente, algún día puedan ser ampliamente aceptados y considerados tratamientos estándar por el grueso de la comunidad médica.

La bioenergética médica no se limita a los dos aspectos ya mencionados, el testeo mediante el esfuerzo mental y el tratamiento a distancia. De hecho, con estas nuevas facultades se abre toda una gama de posibilidades para el terapeuta. En este curso explicaremos las más importantes, pero no las únicas; ya que se pudiera decir que son ilimitadas las posibilidades que ofrece la bioenergética y dependen, sobre todo, de la preparación, intuición y experiencia del terapeuta. Por lo que en este curso abordaremos solo las principales, que puedan servir como plataforma, para que las personas interesadas puedan continuar explorando y descubriendo sus propios caminos.
Para comenzar la bioenergética permite indagar una serie de cuestiones que, en principio quedan vetadas para el practicante del nivel básico. Siempre y cuando se haga la pregunta en forma correcta se puede obtener una respuesta, ya sea que se refieran al plano físico, emocional, mental, sofrológico o espiritual.
El testeo mediante bioenergética permite el tratamiento de enfermedades complejas con mayor eficacia, las cuales difícilmente pueden tratarse con el biomagnetismo convencional, nos referimos a cáncer, esclerosis múltiple, trastornos autoinmunes, cardiovasculares, metabólicos, diabetes… solo por mencionar algunas.
También se puede indagar sobre cuestiones como alimentación, intoxicación, alergias, alteraciones genómicas, cuerpos sutiles (chakras), cuestiones kármicas; y muchos otros aspectos. Por lo que el terapeuta que quiera indagar en estos se ve obligado a estudiarlos con más profundidad. Bien vale la pena el estudio, ya que en la práctica encontramos que las enfermedades no se limitan al plano físico, ni a la presencia de patógenos, sino que por lo regular van asociadas a trastornos emocionales, efectos medioambientales y muchos otros aspectos. Finalmente, con la bioenergética podemos tratar a la persona como un todo, con un enfoque holístico.

La bioenergética permite el uso de diversas herramientas, así que el terapeuta podrá elegir las que más le convengan, por lo que ya no hablamos de una sola forma de tratamiento, sino que cada persona va creando su propia forma de trabajo, en base a su experiencia, preferencia y resultados. Ya no podemos hablar de un protocolo, o una serie de protocolos. Las listas y protocolos presentados solo sirven de ejemplo, o de base para que el biomagnetista cree sus propios protocolos.
Lo mismo puede decirse de los medios para llevar a cabo el rastreo. El Dr. Goiz siempre usó las extremidades inferiores para detectar la respuesta del paciente; sin embargo, en el nivel avanzado se pueden usar otros medios como los dedos de las manos, o el péndulo. Abordaremos todas estas técnicas en nuestro curso explicando detalladamente la forma de usarlas.

Cómo comenzar a practicar.

Como primer punto, se debe aclarar que el nivel avanzado y la práctica de la bioenergética no es para todos. Se recomienda por lo menos haber cursado el nivel básico y haber practicado en forma continua por al menos 6 meses con el nivel básico. Sobre todo, porque la bioenergética requiere que el terapeuta tenga completa seguridad en lo que hace, la cual solo se adquiere con la práctica. Aun así, no está garantizado que todas las personas puedan desarrollar las facultades propias del segundo nivel, por lo que la persona no deberá sentirse frustrada si no obtiene los resultados que esperaba.
Si usted ya ha practicado el nivel básico y domina completamente el rastreo con imanes, conociendo los puntos y los principales pares biomagnéticos, así como la teoría del nivel básico, entonces usted es un candidato para estudiar el nivel avanzado y comenzar a practicar la bionenergética. De lo contrario, lo recomendable es que siga afianzando los conocimientos y siga practicando por más tiempo el nivel básico. Más vale aprender bien a caminar, antes de intentar correr, o incluso volar.

 

 

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